San Teófilo de Cesarea es un santo de la iglesia católica quien vivió en los primeros siglos de la era cristiana (siglo II). Su labor fue ejemplar para promover el desarrollo de la joven iglesia católica que apenas estaba estableciéndose; intervino en la organización de actividades como la Pascua, y convocó el Concilio de Cesarea.
Posiblemente San Teófilo nació a mediados del siglo II en la comunidad de Cesarea de Palestina. Miembro de una familia cristiana, trabajó en la organización de la iglesia católica desde su juventud, llevando una vida de servicio religioso que lo acercó al cargo de obispo de Cesarea.
En aquellos días, muchos eran los asuntos que faltaban por definir y esclarecer en la organización de la iglesia. Uno de ellos era la celebración de la Pascua. Para los judíos, la fecha de la Pascua era el día 14 del mes de Nisán, que son dos semanas después de la luna nueva del equinoccio de primavera del hemisferio norte, sin considerar el día de la semana; esta idea era defendida por una corriente de de seguidores que se llamaban los “cuartodecimanos”. Por otro lado, figuras religiosas como San Teófilo y San Narciso de Jerusalén se oponían a dicha celebración, estableciendo que la fecha debía ser conmemorada el domingo siguiente a dicha fecha judía, eran la corriente de los “dominicales”.
En dicha época, para tratar de unificar las posturas acerca de la celebración de la Pascua, el obispo Teófilo convocó al concilio de Cesarea, y magistralmente dirigió el concilio y escribió una encíclica para que todas las iglesias católicas celebraran la Pascua de acuerdo con el actual calendario, siendo una fecha variable, pero siempre en día domingo, recordando la Resurrección de Cristo.
No obstante, las controversias y diferencias en relación a esta fecha se mantuvieron hasta el siglo IV. Se desconoce si el obispo Teófilo falleció mártir, lo que es poco probable puesto que no existe ningún relato biográfico de este acontecimiento. La fecha de muerte posiblemente fue en el año 195, a comienzos del mandato del emperador Septimio Severo.
Oración a San Teófilo de Cesarea
Oh San Teófilo, amado protector y guía de la Iglesia Católica, te pedimos que intercedas por nosotros ante nuestro Señor y nos concedas la fuerza y la sabiduría para seguir tu ejemplo en el servicio a la fe.
Tú, que trabajaste incansablemente por la organización de la Iglesia y la unificación de los creyentes, ayúdanos a mantenernos unidos en la fe y en el amor a nuestro prójimo.
Que tu ejemplo de humildad y dedicación nos inspire a seguir trabajando por el bien de nuestra comunidad y a difundir la palabra de Dios a través de nuestras acciones y nuestras palabras.
Oh San Teófilo, ruega por nosotros y por todos aquellos que buscan la verdad y la justicia en este mundo. Amén.