Santa Burgundofara: Fundadora y Abadesa de Faremoutiers
Santa Burgundofara, también conocida como Santa Fara, fue una abadesa del siglo VII, fundadora del famoso monasterio de Faremoutiers en la Galia (actual Francia). Nació en una familia noble en la región de Borgoña y fue parte de una familia de santos, incluyendo a sus hermanos San Cagnoaldo y San Faro de Meaux. Su fiesta litúrgica se celebra el 3 de abril.
Vida y Vocación Religiosa
Desde su infancia, Burgundofara mostró una inclinación hacia la vida religiosa, influenciada por San Columbano, quien visitaba con frecuencia a su familia. A pesar de la oposición inicial de su padre, quien quería que se casara, Burgundofara decidió consagrarse a Dios. San Eustaquio, el sucesor de San Columbano, la apoyó en su decisión y finalmente su padre cedió, permitiendo que su hija siguiera su vocación.
En el año 614, Burgundofara recibió el velo religioso de manos del obispo Gondoaldo de Meaux y en 620 fundó el monasterio de Evoriacum, que más tarde sería conocido como Faremoutiers, «el monasterio de Fara». Este monasterio seguía la regla de San Columbano y se convirtió en un importante centro espiritual en la región, famoso por su disciplina y por la formación de futuras santas.
Abadesa y Milagros
Santa Burgundofara gobernó el monasterio durante 37 años, destacándose por su piedad y capacidad administrativa. Bajo su liderazgo, el monasterio se convirtió en un refugio para las mujeres que buscaban una vida de dedicación a Dios. Según las crónicas, Burgundofara también fue conocida por su firmeza y disciplina en la vida monástica, lo que le valió tanto admiración como temor entre sus monjas.
Se le atribuyen varios milagros, tanto en vida como después de su muerte. Uno de los milagros más conocidos ocurrió siglos después, en 1622, cuando una monja ciega recuperó la vista al tocar sus reliquias.
Veneración y Legado
Santa Burgundofara es venerada no solo en Francia, sino en varias partes de Europa. Su monasterio, Faremoutiers, se convirtió en un importante centro de peregrinación y su ejemplo de vida religiosa influyó en la expansión del monacato femenino en la región. Sus reliquias se conservan en Faremoutiers y en Champeaux, donde sigue siendo invocada especialmente como protectora de la vista y de los queseros.
Oración a Santa Burgundofara
Oh Santa Burgundofara, fundadora de Faremoutiers y ejemplo de piedad, intercede por nosotros ante Dios.
Guíanos en el camino de la fe, fortalece nuestra devoción y ayúdanos a seguir tu ejemplo de humildad, disciplina y amor a Dios.
Te pedimos que protejas a nuestras comunidades y nos inspires a vivir con la misma entrega y fervor que mostraste en tu vida monástica.
Santa Burgundofara, ruega por nosotros y por la Iglesia, para que podamos ser dignos de las promesas de Cristo.
Amén.
El Legado de Santa Burgundofara
Santa Burgundofara sigue siendo una figura venerada en la Iglesia Católica, especialmente en Francia, donde su legado como fundadora y abadesa de Faremoutiers continúa inspirando a los fieles. Su vida de servicio a Dios y su firmeza en la fe son un recordatorio de la importancia de la devoción y la disciplina en la vida cristiana.