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San Hugo, Abad

san Hugo abad

San Hugo Abad es un santo de la iglesia católica quien vivió durante el siglo XIII. Este hermano benedictino fue uno de los más importantes y respetados monjes de la abadía de Cluny, la cual dirigió con sabiduría durante toda su vida, promoviendo la fe y la disciplina, así como participando en varios asuntos eclesiásticos como consejero de varios pontífices, de soberanos de Europa occidental y fundador de varios monasterios.

Hugo nació en el año 1204 en la localidad de Semur, en el seno de una familia distinguida de la región de Borgoña, cuyos padres eran condes de Semur y descendientes de la  distinguida familia Vergi.

Aunque su padre quería que Hugo se dedicase a la carrera de la nobleza y el ejército, el joven ya había desarrollado en su corazón una inclinación sincera a las actitudes cristianas de piedad y caridad. Fue enviado a estudiar letras en Chalom-sur-Saone, donde conoció a los monjes de la abadía de Cluny bajo la dirección del abad Odilón y decidió ingresar a esta comunidad, siendo aceptado con apenas 14 años.

Con 20 años de edad, Hugo fue ordenado sacerdote y a los pocos meses se le designó para el cargo de prior. Cuando san Odilón falleció, los hermanos de la comunidad de Cluny de forma unánime escogieron como su sucesor a Hugo.

Fue un director espléndido y servicial. Participó en el Concilio de Reims convocado por el papa León IX, donde apoyó las reformas del pontífice y defendió la fe en contra de la simonía y la omisión del celibato de los sacerdotes. También viajó con el papa a Roma donde participó del Sínodo que condenaba a Berengario de Tours.

El conocimiento y la sabiduría de San Hugo eran tan prestigiados que en el año 1057, fue convocado por el rey en Colonia para ser el padrino de bautismo de su descendiente, el futuro Enrique IV.

También fue mediador de paz en Hungría entre el rey Andrés y el emperador. Apoyó a san Gregorio VII quien fuera también monje de Cluny y juntos se dedicaron a combatir los abusos que sufría la iglesia por la opresión del Estado. A pesar de participar en diversas actividades, el abad Hugo nunca descuidó la administración de su abadía en Cluny, la cual solo florecía cada día más.

Fundó otros templos, un monasterio de cluniacenses en Lewes de Inglaterra, y una congregación de hermanas religiosas de clausura en Marcigny; así como un hospital para leprosos donde realizó prodigios y curaciones.

San Hugo introdujo en la liturgia de occidente el cando de  Veni Creator, durante el tiempo de Pentecostés. Con 80 años de edad, san Hugo partió a la paz del Señor el 29 de abril de 1109. Su culto fue aprobado en 1320.

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