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La Comunión cotidiana: Alimento esencial para el cuerpo y el espíritu

La Comunión cotidiana: Alimento esencial para el cuerpo y el espíritu

La importancia de la Comunión cotidiana: Alimento para el cuerpo y el espíritu

Un texto del sacerdote jesuita francés Bertrand de Margerie, resalta los beneficios de participar diariamente en la Santa Misa y recibir la Comunión, en contraposición a limitarse a hacerlo únicamente los domingos.

El Padre Bertrand de Margerie, nacido en 1923 y fallecido en 2003 en París, ha escrito numerosos textos de Teología católica, inspirados en los trabajos de San Agustín y Santo Tomás de Aquino. Muchas de sus obras han sido recopiladas por la Enciclopedia Católica.

En su texto «Necesidad de la Comunión cotidiana», el sacerdote francés señala que «desde siempre, los cristianos se han cuestionado acerca del ritmo de su participación en la Eucaristía».

«Este ritmo ha variado a lo largo del tiempo y en diferentes países», indica, sin embargo, en la actualidad «la Iglesia Católica recomienda explícitamente a sus fieles la recepción diaria de la Comunión».

En declaraciones a ACI Prensa, el director de la Enciclopedia Católica, José Gálvez Kruger, destacó que «muchas personas no comprenden plenamente la importancia de lo que se pide en el Padre Nuestro» cuando se menciona el «pan nuestro de cada día» o «pan cotidiano».

«La petición del ‘pan cotidiano’ debe entenderse como la satisfacción de la necesidad de alimentarse físicamente, pero también como la necesidad del alimento espiritual», subrayó.

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