Santa Inés es una muy conocida y recordada mártir de la iglesia católica. Realmente su nombre era Agnes, una voz latina que denota un adjetivo el cual se traduce como “pura o casta”, de hecho, Santa Inés es considerada por la iglesia católica como la Santa Patrona de la Pureza.
La noble santa Inés fue martirizada teniendo apenas tan solo 13 años de edad; se estima que su sufrimiento por ser cristiana tuvo lugar cuando inicio la persecución contra los cristianos por parte de emperador Diocleciano, alrededor del año 303.
Santa Inés nació en el seno de una familia romana de buena posición, al ser ella una jovencita hermosa y rica, los hombres jóvenes de las familias más importantes de Roma la pretendían aún a su corta edad. Sin embargo, Santa Inés en su corazón desde muy joven ya conocía el amor de Cristo y quería consagrar su cuerpo y su alma a él. Muchos pretendientes trataron de convencerla de que los aceptase, propuestas que ella siempre rechazaba. En venganza, los pretendientes la acusaron ante el gobernador revelando que Santa Inés era cristiana.
La joven santa fue hecha presa y frente al mismo gobernador declaró que su único esposo sería Jesús. Se le impuso el primer castigo de ser arrastrada hasta los ídolos para ofrecer incienso, aunque sus torturadores no pudieron lograr esto, los únicos movimientos que hicieron sus manos fueron los de la señal de la cruz.
Como segundo castigo, el gobernador ordenó que se le llevara a una casa de prostitución y que perdiese su virginidad violada por todos quienes quisieran. Acudieron a aquel centro cruel muchos hombres malvados y crueles pero la vista de Santa Inés les indujo un terrible sentimiento de horror, el único que se atrevió a acercársele fue cegado por un rayo que cayó sobre la tierra. Por petición de la propia santa Inés este hombre recupero la vista.
El gobernador lleno de ira al ver que no podía cumplir su cometido, ordenó decapitarla. Santa Inés fue enterrada en la vía Nomentana, lugar en el que en la actualidad se encuentra la basílica en su honor.
Oración a Santa Inés
¡Oh gloriosa Santa Inés, serviste a Dios con humildad y confianza en la tierra y ahora disfrutas de una vision como beata en el cielo, ya que perseveraste hasta la muerte y te ganaste la corona de la vida eterna
Recuerda ¡Oh Santa Inés!, los peligros que nos rodean en esta tierra desolada e intercede por mi en todas mis necesidades y problemas.
Amén.
Oración a Santa Inés (II)
Dios Padre amoroso que eliges a los más débiles ante el mundo para confundir así a los fuertes, concédeme la gracia de ser como Santa Inés, fiel al amor de tu hijo Jesús que murió por nosotros en la Cruz, fiel en lo mucho y en lo poco, fiel en la alegría y en la tristeza, fiel en el estudio y en la diversión.
Que nunca me aparte de tí y, que por la intercesión de Santa Inés, bajo el amparo protector de la Virgen María me mantengas siempre alejado de las ocasiones de pecado.
Amén
Oración de petición a Santa Inés
¡Oh Dulce Santa Inés!, imploro fervientemente tu compasión y me encomiendo a tus oraciones. ¡Oh noble virgen!, que despreciaste todas las cosas terrenales y prefieres el amor de Cristo a la gloria del mundo.
La muerte fue bienvenida a ti, y los santos ángeles esperaban que tu alma la transmitiera a las alegrías del Paraíso, donde, adornada con la palma del mártir, llegaste a las nupcias del Esposo celestial.
Yo también lo busco; digna interceder por mí para que me conceda salud mental y corporal, refrenar las tentaciones del diablo, extinguir los deseos de la carne, darme tiempo para arrepentirme de verdad y comenzar la enmienda de la vida, concédeme la remisión de todos mis pecados, junto con la gracia para hacer un buen final y una muerte feliz. Amén.
Oración a Santa Inés para peticiones urgentes
Oh Dios Padre Misericordioso, concédeme la dicha de saber imitar a santa Inés virgen y mártir, que siendo aún casi una niña ofreció en Roma el supremo testimonio de la fe, consagrando con el martirio el título de la castidad, ayúdame a seguir sus pasos, a ser: fiel al amor de tu hijo Jesús, que murió por nosotros en la Cruz, fiel en lo mucho y en lo poco, fiel en la alegría y en la tristeza, fiel en la adversidad y en la bonanza, fiel en el hogar y en trabajo, fiel en el estudio y en la diversión fiel en la bondad y en la oración.
Que nunca me separe de ti, y, que por la intercesión de Santa Inés, pueda obtener remediar esta apremiante dificultad que tanto me aflige: (hacer la petición).
Señor, te suplico me escuches, confiando en tu gran bondad y por la mediación de santa Inés, espero ser prontamente socorrido.
También te solicito me ayudes a caminar rectamente por el sendero de la fe, el amor, la virtud y la bondad, y bajo el amparo protector de la Santísima Virgen María, me mantengas siempre alejado de las ocasiones de pecado, de injusticias y maldades, de violentos y opresores y me concedas todo aquello que sea más conveniente para tu mayor honra y gloria y provecho de mi alma, para morir en tu gracia y gozarte eternamente en la bienaventuranza del cielo.
Amén.
Oración a Santa Inés para recuperar cosas perdidas
Oh Dios Todopoderoso, que eres especialista en llenar de humildad los corazones cristianos. Tú que eres capaz de dotarnos a todos de la bienaventuranza en la tierra y en el cielo.
Oh Santa Inés mártir, que fuiste expuesta a la mayor de las vergüenzas en aquel prostíbulo, mujer valiente que defendiste tu cuerpo frente a las pasiones desmedidas de aquellos romanos.
Hermosa santa religiosa, prodigiosa mujeres virginal, que con tu amor y sacrificio llegaste a la cima del cielo. Se el ejemplo de mi actuar, para cumplir con las leyes divinas de Dios Nuestro Señor. Con gran fe espiritual te imploro para que aparezca mi (Nombre del objeto perdido) ya que tiene gran valor sentimental para mi causa. Sé que lo material se puede recuperar y es por ello que acudo a ti para que aparezca lo desaparecido.
Oh santa espectacular, de belleza innegable, te pido por la mediación de Dios Todopoderoso para recordar en dónde deje mi (Nombre del objeto que deseas recuperar) porque se me ha extraviado de una manera peculiar. Deseo que no se me pierda para siempre. Santa Inés amada, facúltame de la memoria necesaria para recordar la última vez que lo use para saber el sitio exacto donde lo dejé. Amén.
Oración a Santa Inés para el amor
Dios Todopoderoso y Santa Inés milagrosa, mártir y víctima de las infamias romanas. Te ruego para que fortalezca nuestro amor, nuestro matrimonio.
Anhelo que la relación siga floreciendo tal y como desde el primer día. Protégeme de las injurias, chismes y difamaciones que intenten romper nuestra salvación. Que nuestros enemigos no sean la piedra que haga tropezar nuestros caminos.
Amén.