Escándalo de actos ilícitos y lavado de dinero sacude a la Iglesia Católica de Nicaragua
La Policía Nacional de Nicaragua ha anunciado una investigación en curso a la Iglesia católica local por presuntos actos ilícitos y su supuesta participación en una red de lavado de dinero en el país. Esta investigación surge en medio de la detención de tres sacerdotes en los últimos días.
Según un comunicado emitido por la Policía Nacional, se ha confirmado el hallazgo de «centenares de miles de dólares escondidos en bolsas» en diferentes diócesis católicas del país. La investigación se enfoca en presuntos movimientos delictivos con fondos que ingresaron ilegalmente al país. Las autoridades, como la Fiscalía General de la República, la Superintendencia de Bancos y la Unidad de Análisis Financiero de la Policía, han estado llevando a cabo investigaciones para identificar y detener las actividades ilícitas relacionadas con las diócesis involucradas, aunque estas no fueron mencionadas específicamente en el comunicado.
Durante las investigaciones se ha confirmado la sustracción ilegal de recursos de cuentas bancarias que debían estar congeladas según la ley, así como otros ilícitos que todavía están siendo investigados como parte de una red de lavado de dinero en diversas diócesis del país. La policía también ha descubierto centenares de miles de dólares escondidos en bolsas en instalaciones pertenecientes a las diócesis.
En este contexto, la Superintendencia de Bancos ha solicitado a la Conferencia Episcopal de Nicaragua y al cardenal Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua, que presenten los documentos que demuestren los movimientos de las cuentas bancarias de las diócesis. De esta manera, se busca asegurar que estas instituciones religiosas cumplan con las leyes nacionales y eviten actos ilícitos.
Cabe destacar que el informe policial menciona «actos de traición a la patria» y hace alusión a la violación de ordenamientos jurídicos, financieros y sociales del Estado y el pueblo nicaragüense, aunque no se especifica a qué personajes se refiere.
Estos acontecimientos se suman a la tensa relación entre el gobierno de Nicaragua, encabezado por el presidente Daniel Ortega, y la Iglesia católica. Ortega ha utilizado términos despectivos para referirse a los obispos católicos, calificándolos de «políticos», «golpistas», «delincuentes» y «demonios con sotana». En 2022, el presidente expulsó al nuncio apostólico Waldemar Sommertag del país, luego de que el representante del Vaticano expresara su intención de mediar en la liberación de presos políticos.
Aunque no se ha confirmado si esta investigación está directamente relacionada con la detención de los tres sacerdotes, es importante mencionar que estos han sido arrestados por supuestos actos que menoscaban la soberanía, la independencia y la autodeterminación del país. Los sacerdotes detenidos están siendo investigados por asuntos administrativos relacionados con una ONG católica cerrada en 2022.
La investigación en la Iglesia Católica de Nicaragua ha generado una gran conmoción en el país. Las autoridades continúan indagando en los presuntos actos ilícitos y el lavado de dinero que se han descubierto en varias diócesis. Este escándalo ha puesto en entredicho la integridad de la Iglesia y ha sacudido a la sociedad nicaragüense.
Es importante destacar que esta investigación aún está en curso y no se han proporcionado detalles específicos sobre las diócesis involucradas. La Superintendencia de Bancos ha solicitado a la Conferencia Episcopal y al cardenal Leopoldo Brenes que presenten los documentos necesarios para demostrar la transparencia de los movimientos financieros de las diócesis y su cumplimiento de las leyes nacionales.
El contexto político en Nicaragua ha contribuido a la tensión entre el gobierno de Daniel Ortega y la Iglesia católica. El presidente ha expresado duras críticas hacia los obispos y ha tomado medidas en contra de representantes eclesiásticos, lo que ha debilitado aún más las relaciones entre ambos.
Mientras tanto, la detención de los tres sacerdotes ha generado preocupación y desconcierto. Aunque no se ha confirmado si están relacionados directamente con la investigación en curso, las acusaciones de actos que menoscaban la soberanía del país han llevado a su arresto y están siendo sometidos a investigación.
Este escándalo en la Iglesia Católica de Nicaragua se suma a las tensiones sociales y políticas que han marcado los últimos años en el país. La población espera transparencia y justicia en esta situación, mientras se busca determinar la verdad detrás de los presuntos actos ilícitos y el lavado de dinero que han salido a la luz.