Hoy, 12 de enero, honramos a los santos que han dejado un legado de amor y servicio en el mundo. Su vida es un testimonio de cómo podemos vivir en la gracia de Dios y llevar esperanza a los demás. Nos enseñan a tener una actitud de humildad y servicio, recordándonos que debemos poner las necesidades de los demás antes que las nuestras. Oremos para que su ejemplo nos inspire a seguir en sus pasos y a llevar la luz de Cristo a nuestro mundo necesitado. Que su intercesión nos acompañe en nuestro camino hacia la santidad.